Ibersol se endeudará en 852 millones para comprar Telepizza
La opa del grupo luso Ibersol sobre Telepizza , a un precio de 2,41 euros por acción, recibió ayer el visto bueno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Su oferta, al igual que la oferta presentada por la familia Ballvé y Permira (2,15 euros) y CVC e Inveralia a través del Grupo Zena (2,40 euros), se dirige a la totalidad de las acciones y obligaciones convertibles –que abonará a un mínimo de 24,63 euros y un máximo de 24,88 euros–.
La opa está condicionada a la aceptación del 49% del capital. El grupo luso podría renunciar a esta condición si el Banco Espírito Santo de Investimento, que le está financiando en la operación, le autoriza.
Con esta entidad, el grupo ha diseñado toda su estrategia de financiación, tanto a corto como a largo plazo. Para hacer frentea ésta operación, Ibersol cuenta con un crédito de tres meses por un máximo de 642 millones de euros. Posteriormente, se prevé un endeudamiento a largo plazo de 858 millones de euros, que servirá tanto para afrontar la adquisición como para reestructurar su endeudamiento.
La compañía reconoce que si prospera su oferta, asumirá un nivel de endeudamiento elevado. A su vez, considera que, con arreglo al plan de negocio que ha esbozado, la estructura financiera debería ser razonable y permitir alcanzar rentabilidades a largo plazo, sin que el desarrollo del negocio quede comprometido por la asunción de la financiación.
El objetivo de Ibersol con la compra de Telepizza es consolidarse en el mercado ibérico e impulsar su estrategia de internacionalización. Con la suma de Telepizza, en la que tiene vocación de permanencia a largo plazo, el grupo luso alcanzaría una facturación de 575 millones de euros y un ebitda (resultado bruto de explotación) de 80 millones. Si las autoridades de Competencia de Portugal, que todavía no han aprobado la compra, cuestionan la operación, Ibersol vendería los activos de Telepizza en ese país.
El grupo, que baraja diferentes posibilidades de integración de la cadena española, sí asumirá la gestión, por lo que su intención es adaptar el órgano de administración de Telepizza “a la nueva realidad accionarial”. De ahí, que si se hace con la mayoría del capital social, tratará de proponer la designación de buena parte del consejo.
Al igual que con la propuesta del grupo Zena, el actual presidente, Pedro Ballvé, que controla el 20,532% del capital, quedaría como un accionista minoritario. Ibersol tiene la intención de promover “tan pronto como le sea posible tras la liquidación de la oferta, la modificación de los estatutos para eliminar los blindajes del consejo de administración”.
Si la oferta de Ibersol obtiene un nivel de aceptación elevado, el grupo promoverá su exclusión de bolsa, lo que supondrá la reducción del consejo y del número de comisiones delegadas.