Sol Meliá pierde la gestión de 21 hoteles hasta junio.
La cadena no ha firmado ningún proyecto desde enero.
La cadena hotelera Sol Meliá ha perdido la gestión de 21 hoteles durante el primer semestre del año, según la información hecha pública por la empresa a finales de 2002 y en junio de 2003.
La hotelera mallorquina cerró el ejercicio pasado con una cartera de 350 establecimientos y 30 contratos firmados de nuevas aperturas, y a finales del primer semestre de este año la empresa comunicó a la CNMV un portafolio de 338 establecimientos, nueve aperturas de enero a junio y que posee 21 contratos firmados.
Esto demuestra que la cadena, presidida por Gabriel Escarrer, ha perdido 21 establecimientos desde enero a junio y que además no ha firmado ningún proyecto de nueva apertura.
La mayor parte de las desafiliaciones corresponde a Croacia, lugar donde la empresa dejó de gestionar 11 establecimientos (ver LA GACETA del pasado 18 de marzo). Las otras diez bajas corresponden a cuatro hoteles en Túnez, tres en España, y uno en Tailandia, Portugal y Andorra.
No está tan claro el tipo de contrato que tenía la empresa con estos establecimientos, la gran mayoría de las bajas corresponden a gestión. En estos casos, la empresa argumenta que como no cumplían los estándares de calidad de la marca», no han renovado el contrato.
Pero, en el caso de dos hoteles españoles, Sol Costa Golf (en Chiclana) y Castellón Center, unidos a la cadena mallorquina bajo un acuerdo de asociación comercial, ha sido la propiedad de los inmuebles la que no ha querido firmar los contratos de gestión, según las fuentes consultadas por este periódico. Por ello, estos dos establecimientos han pasado a formar parte del portafolio de Vincci Hoteles.
Por otro parte, la cadena contaba en marzo de este año, según los datos facilitados entonces, con 91 hoteles en propiedad, y ayer fuentes de la empresa consultadas por este periódico dijeron que actualmente mantienen 90 establecimientos en propiedad. Luego, la cadena mallorquina ha vendido un establecimiento durante el primer semestre de este ejercicio, aunque esta información no es compartida por la compañía. No es de extrañar, puesto que los números no cuadran y la empresa pretende deshacerse de activos no estratégicos, para reducir sus elevados niveles de deuda.»