Solo dos franquicias malagueñas entre las 100 primeras de España
Si usted tiene una empresa, quiere expandirse por España o el extranjero, y no quiere gastar apenas dinero lo tiene fácil: debe crear un sistema de franquicias. Esta fórmula, cada vez más arraigada en nuestro país, está ganando adeptos entre el empresariado malagueño, aunque todavía no está entre los primeros puestos del panorama nacional. De hecho, sólo dos compañías locales se encuentran entre las 100 primeras franquicias en España por facturación.
Para encontrar la primera firma malagueña en el listado hay que dejarse caer hasta el puesto 19, donde aparece la inmobiliaria MC. Esta firma, que facturó 180 millones de euros en 2005, ha subido seis puestos desde el ejercicio anterior. La segunda, y última, empresa local en este prestigioso ranking es la cadena de ropa infantil Charanga, que ocupa el lugar número 71 –ha subido un puesto– con unas ventas de 35,5 millones de euros. Los grupos de alimentación Día y Spar, y la agencia Viajes Marsans son las tres mayores franquicias en España por volumen de ventas.
Tener sólo dos empresas malagueñas entre las 100 mayores del país tampoco debe ser motivo de desánimo. Más bien al contrario. María Dolores Sevillano, directora de consultoría de Tormo, explica que Málaga está teniendo un gran desarrollo en el sistema de franquicias hasta el punto que acapara un tercio de todas las que se crean en Andalucía, y esta comunidad es la cuarta más fuerte de España». Málaga tiene actualmente 33 franquicias nacidas en esta provincia. MC y Charanga son las más fuertes, aunque hay otras marcas que están teniendo un fuerte crecimiento como los centros de estética Cellulem Block (ya dispone de 250 establecimientos en el país), Almeida Viajes (con 126 locales), las tiendas de moda íntima Modimel–La (75 tiendas), o los bares de copas La Botellita (40 recintos).
¿Qué ventajas ofrece el sistema de franquicias? La verdad es que muchas, ya que se benefician las dos partes. El emprendedor que quiere montar un negocio sólo tiene que poner el dinero –suele oscilar entre los 20.000 y los 200.000 euros– para ampararse en una marca ya conocida en el mercado. El propietario de la franquicia le explica cómo debe ser el local, le da su lista de proveedores, su marca y su imagen. Ve ampliado su número de establecimientos sin que les cueste apenas un euro. Sólo el tiempo empleado.
Sevillano destaca el peso de Málaga en sectores, por ejemplo, como el de la moda infantil, donde Charanga, Mayoral y Nenuco tienen una amplia presencia en España. Sin embargo, opina que esta provincia aún tiene margen para crecer más, dado su dinamismo y su contacto con el sector turístico. Ya hay tres cadenas de franquicias extranjeras –Acadomia, Chipsaway y Western Union– que tienen su sede en la Costa del Sol desde donde se están expandiendo al resto del país.
Los expertos coinciden en que esta fórmula empresarial es satisfactoria, sobre todo, en una economía como la malagueña basada en la proliferación de pequeñas y medianas empresas. «Es una buena opción para abrir nuevos mercados sin mucho coste. Los gallegos lo han hecho muy bien y en Málaga deberíamos hacer lo mismo», afirma Francisco Villalba, director de Analistas Económicos de Andalucía.
Sin embargo, hay que tener claro que el montaje de una franquicia no es fácil. Es necesario un modelo de negocio muy definido, sin fisuras y lo suficientemente atractivo para que un empresario decida apostar por él. «Hay que preparar una documentación completa, adaptable en función de las necesidades de mercado de cada territorio y, además, que se ajuste a la realidad», señala María Dolores Sevillano. Villalba es de la misma opinión. «Hay que tener una visión abierta y una buena estructura administrativa para tener control sobre la marca y las ventas. Esa organización es uno de los fallos que suelen tener las pymes locales al ser pequeños negocios», afirma este experto.
Los jóvenes emprendedores también están poniendo interés en las franquicias, aunque desde el punto de vista de montar un negocio de una firma ya conocida y no como franquiciador. «La gente joven está empezando y su único interés suele ser sacar su negocio adelante. La franquicia es una forma estupenda de expandirse pero más a medio o largo plazo», destacan fuentes de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Málaga.
Son aún pocos los empresarios locales que miran al exterior para diversificar su negocio y consolidar sus ingresos. La franquicia se abre como una posibilidad, aunque también tiene sus riesgos si el proyecto sale mal y se daña la imagen. Es cuestión de trabajo, valor y suerte. «