La franquicia Eskapark entre las mejor valoradas por sus actividades de team building y formación de equipos
Cada vez son más las compañías que optan acudir a salas de escape para actividades de team building, ya que este tipo de juegos aúna ocio y trabajo y fomenta tanto las habilidades necesarias para el trabajo en equipo, como la capacidad de organización y liderazgo, además de ser un buen entrenamiento para la iniciativa personal y la resolución de problemas.
También, este tipo de actividades destinadas a empresas pueden ser adaptadas y personalizadas al tipo de compañía y objetivo deseado, ya sea puramente empresarial, lúdico o una combinación de ambos, potenciando la imaginación, la motivación y la fidelización a la empresa.
Gracias a esta forma de trabajo, a la gran variedad y cantidad de juegos diseñados, la organización de actividades vinculadas al sector, y un equipo creativo multidisciplinar, la franquicia Eskapark ha sido elegida para sus actividades de team building por numerosas empresas como Decathlon, y por otras importantes entidades como Unicef o Movistar+ dentro de sus iniciativas de marketing.
Eskapark es una red de franquicias de ocio española con seis años de experiencia en el sector del Escape Room, y es una de las enseñas pioneras en nuestro país en el uso de las salas de ocio en vivo para el team building empresarial y la formación de equipos de trabajo.
Actualmente, la marca cuenta con cuatro centros ubicados en Vigo, A Coruña, Santiago y Colindres, Cantabria, dos más que abrirán en Santoña, Cantabria y Valladolid próximamente.
El objetivo es finalizar 2019 con cerca de 10 centros y convertirse “en la mayor marca de un sector muy atomizado, que crece a un ritmo cercano al 500% al año y en el que aún no existe una enseña de referencia a nivel nacional”, en palabras de David Sainz, International Expansion Manager.
Sainz manifiesta también que la firma tiene la intención de continuar expandiéndose por toda la geografía nacional, tanto en grandes poblaciones como en pequeñas, con especial interés por el norte, en donde ya percibe un incipiente movimiento turístico en torno al escape room, y hacer sus primeras incursiones por latinoamérica.