Emprender una franquicia de forma segura
El aumento de los despidos está ofreciendo una oportunidad a aquellos emprendedores en paro que ven en la fórmula de «Ser tu propio jefe» una atractiva alternativa frente a la búsqueda de empleo improductiva. No todo van a ser sombras en la actual coyuntura que nos rodea, lo que sí es cierto es que en estas circunstancias la seguridad y el descenso del riesgo son características fundamentales a la hora de poner en marcha un negocio. Características que pueden proponer las franquicias. La tasa de fracaso para una franquicia es inferior a la tasa de fracaso empresarial. Además, el franquiciador ofrece un sistema cuyo éxito ha sido probado anteriormente.
Si tenemos en cuenta los datos anteriores, en Estados Unidos, la creación de empresas aumentó significativamente tras la recesión de 1990-1990. Y a partir de la recesión de 2001, la franquicia, el segmento que acuña un mayor número de empresas pequeñas, sufrió un crecimiento acelerado del número de unidades franquiciadas, que crecieron anualmente una media del 6% hasta 2005.
Aunque las perspectivas de este año no sean tan positivas (según las perspectivas de la Asociación Internacional de Franquicias, el número de unidades caerá alrededor del 1%), existen razones para que los emprendedores, al menos, estudien la idea de comprar una franquicia este año.
Comenzar desde cero no es un paso fácil, sobre todo porque un emprendedor debe conocer antes toda la información posible antes de tomar una decisión de compra. Como factor positivo que facilita este primer paso, provocado por las circunstancias de la crisis, es la posibilidad de negociar precios a la baja, tanto para el alquiler de locales como a la hora de llegar a un acuerdo con el franquiciador.
La información es otro elemento fundamental para afrontar un negocio con menos riesgos. En estos momentos, los ciudadanos tienen mayor acceso a la información y, por tanto, a la posibilidad de elegir. Además, existen medios especializados como páginas web o guías de franquicias, donde el emprendedor puede informarse sobre los diferentes conceptos de negocio existentes en el mercado. A estos directorios se les une los diferentes rankings de facturación que dan buena cuenta del funcionamiento de todas ellas. Con esta información, el emprendedor puede formar sus primeras bases y comprobar cuál es la franquicia que mejor se adapta a sus necesidades.
Además, estas guías suelen aportar datos sobre la inversión inicial y los requisitos económicos de entrada, una ayuda especialmente eficaz en estos momentos en los que la recesión ha hecho un poco más difícil la obtención de la financiación y que sirve a los posibles compradores a superar las barreras iniciales. A lo que contribuye, especialmente que algunos franquiciadores estén ofreciendo soluciones creativas como la renuncia a los primeros meses de los pagos de cánones o descontar la cuota de franquicia.
Otra ventaja que surge en estos momentos es que todo es negociable, por eso el emprendedor puede poner sobre la mesa una serie de condiciones y realizar su propio casting sobre aquellos negocios de franquicias que mejor asistencia económica y financiera ofrezcan.
Después de reducir las opciones a las más interesantes, llega el momento de hablar con otros franquiciados, muy fáciles de localizar porque, generalmente, todos utilizan el mismo nombre de la empresa en todo el país. En la entrevista el emprendedor tendrá que preguntar sobre la experiencia de los franquiciados con el franquiciador en cuestiones como: si reciben la información adecuada, el apoyo necesario, cuáles son sus problemas, sus preocupaciones, si volverían a elegir esa enseña y si cumple con sus expectativas laborales y personales.
Teniendo estos aspectos en cuenta, ¿ merece la pena? La compra de una franquicia ayuda a mitigar algunos de los riesgos de poner en marcha un negocio. Por otro lado, la franquicia tiene sus contras para aquellos emprendedores que no les gusta trabajar bajo las reglas de nadie, ya que es probable que se rebelen contra las normas que imponen los franquiciados. Pero, lo cierto es que las ventajas son muchas, entre ellas, el hecho de que un recién despedido sin experiencia en un sector determinado pueda pasar formar parte del sistema con su negocio debido a que la franquicia aportaría este sustento necesario y el respaldo de la marca. Sin duda, una opción a la que vale la pena echar un vistazo.