Fusiones y adquisiciones entre pymes, garantía para la continuidad de la empresa
Cada vez son más las pymes que echan el cierre antes de sopesar las diferentes opciones que existen para sobrevivir. La fusión empresarial es una de ellas, una vía &ndash en ocasiones única&ndash, para la continuidad de una empresa.
Cuatro razones han hecho que estas uniones sean ahora más necesarias que nunca: las fluctuaciones en los precios del combustible, que durante algunos meses han alcanzado cuotas prohibitivas, al igual que la subida de las materias primas, la crisis financiera y crediticia, en estos momentos conseguir un crédito se convierte para muchas empresas en una tarea casi imposible, la recesión o parada económica, y el incremento de la moneda euro, que provoca una pérdida de la competitividad, ya que se ha apreciado considerablemente en los últimos tiempos.
Razones de peso
«O la empresa crece, se fusiona, se vende o se muere», es la afirmación del consejero delegado de VR Business Brokers España, José Luis Varas. Según él, en España muchas de las pequeñas y medianas empresas están en una «situación de desahucio» y su fusión les permite resolver problemas de solvencia y crecer en el mercado.
De hecho, se debe diferenciar entre dos tipos de actuación: por combinación o por anexión. En la primera, se trata de cuando dos o más compañías se unen para construir una nueva. Todas se disuelven pero no se liquidan. La segunda, se da cuando una sociedad absorbe a una o varias sociedades.
Aunque bien es cierto, que antes de que se pueda llegar a la fusión para solucionar sus problemas, se tiene que atender a ciertos aspectos, tal y como se recomienda desde VR Business Brokers, ya que no todas las pymes tienen la posibilidad de fusionarse, debido al selectivo mercado existente. Sólo lo harán aquéllos que tengan mayores recursos y estén más preparados.
Pero ¿ qué buscan las empresas a la hora de fusionarse? Lo primero es mantener una mayor participación en el mercado, ya que gracias a la unión con otra empresa se puede ganar más notoriedad. Mantener la presencia en un nicho específico es otra de las opciones que se busca alcanzar. Pero no sólo se realizan estas fusiones en épocas de incertidumbre económica, son muchas las razones que llevan a las empresas a fusionarse: porque se busque dar un cambio estratégico a la compañía, o defenderse frente a la competencia.
Otras empresas van más allá y se vuelven ambiciosas con el deseo de crecer o de garantizar la continuidad de su negocio. Pero quizá la razón más común de todas sea el ahorro de costes que pueden llegan a conseguir. Está claro que muchas empresas ya no pueden mantener las reducciones de la caída en las ventas y esto conlleva unos recortes de personal, que a veces no son suficientes, lo que obliga a las compañías a buscar sinergias con otras y fusionarse.
En definitiva, y tal y como se señala desde VR Business Brokers, hay que abandonar posturas inmovilistas y prepotentes que consideran que la empresa sólo puede sobrevivir por sus propios medios para abrirse a la ayuda de otras organizaciones. Una postura que, según Varas, no se lleva mucho en España: «Si no se cambia la mentalidad, no se podrán dar las fusiones».
¿ Qué depara el 2009?
En una consulta a 164 ejecutivos europeos, el 51% asegura que mantiene planes de fusiones y adquisiciones y que 2008 no les hace echarse atrás. De hecho, un 16 % asegura que la crisis les anima a apostar más si cabe por las operaciones corporativas y un 6 % adicional habla de «fuerte incremento» en sus expectativas de que su compañía se fusione con otra. Sólo un 27 % cree que ahora no es el mejor momento para este tipo de operaciones.
Servicios, el sector más activo
&bull, El sector servicios es el predominante en estas operaciones, alcanzando casi la mitad del total, con un 48,4%.
&bull, Le siguen las actividades de comercio con un 20,4%, aunque si se consideran juntos los dos grupos en los que se han dividido las ramas manufactureras, son estas actividades las que se colocarían detrás de los servicios no comerciales, con el 22,8%.
&bull, El sector de la construcción se sitúa a continuación, con un porcentaje mucho menor y aportando sólo el 4,5 % del total de las operaciones realizadas.
&bull, El siguiente es el sector agrario, que ocupa un 2,3% del total.
&bull, Y por último, el sector de extracción no realiza casi fusiones ni adquisiciones, y se sitúa con un 1,6 % en última posición.