El Corte Inglés define su estrategia de inversión
El líder español de la distribución mejoró su beneficio neto un 6,8% y aumentó los ingresos un 8,5%. El grupo aceleró su política de inversiones para potenciar las nuevas líneas de negocio y crecer en el exterior.
El Corte Inglés invirtió más de tres millones de euros diarios en su crecimiento durante su último ejercicio. En conjunto, el gigante español de la distribución destinó más de 1.140 millones a nuevos establecimientos, lo que supone un 42% más en relación al ejercicio anterior, y el esfuerzo inversor más elevado de los últimos años.
El objetivo del grupo es estar presente con sus distintos formatos en todos los núcleos de población importantes. Para ello, la compañía inauguró cuatro nuevos grandes almacenes en Barcelona, Málaga, Pamplona y Castellón, y un nuevo Hipercor en Málaga. En paralelo, puso en marcha varios outlets o centros de descuento.
En marzo de 2006, inauguró un gran almacén en Mijas (Málaga) y, el próximo mes de octubre, abrirá sus puertas el centro comercial El Bercial, en Getafe, que será uno de los más grandes de España, y que incluye un gran almacén y un hipermercado, con el reto de convertirse en un referente comercial para la zona sur de Madrid.
Al cierre de 2005, tenía en construcción cinco grandes almacenes en Talavera de la Reina (Toledo), Jaén, Albacete, Elche (Alicante) y Leganés (Madrid), la apertura de los tres primeros será en 2007. En su apuesta por los nuevos negocios, antes de Navidad está prevista la inauguración de la primera tienda Bricor, especializada en bricolaje, junto a su centro de Alcalá de Henares (Madrid).
Resultados
El grupo que preside Isidoro Álvarez obtuvo en su último ejercicio, cerrado el pasado 28 de febrero, un beneficio neto consolidado de 653,14 millones, un 6,82% más que en 2004. La cifra de negocio consolidada del grupo creció un 8,5%, hasta los 15.855 millones, según las cuentas anuales presentadas ayer ante la junta general de accionistas, que aprobó una ampliación de capital por 13,52 millones de euros, lo que sitúa el capital social en 459,81 millones. El grupo logró una rentabilidad de 4,12 euros por cada 100 euros de ingresos, frente a los 4,18 euros de 2004. Sin embargo, sigue siendo la cadena de distribución más rentable en comparación con los líderes mundiales Wal-Mart, Carrefour, The Kroger y The Metro Group.
Con un volumen de facturación quince veces superior, Wal-Mart obtuvo en 2005 una rentabilidad neta del 3,5%. Su inmediato competidor, Carrefour, logró un 2,42%, superior a la cadena estadounidense Kroger (2,1%) y a la alemana Metro (1,1%).Ante los accionistas, el presidente de El Corte Inglés calificó el pasado ejercicio como “satisfactorio” y subrayó la apuesta por la internacionalización y la diversificación.
Por primera vez, confirmó el inicio de gestiones para la implantación de El Corte Inglés en Italia. Hasta la fecha, la cadena sólo está presente con el formato de gran almacén en Portugal con dos establecimientos, aunque prevé abrir un tercero en las proximidades de Lisboa. En 2005, sus filiales Sfera Joven y Viajes El Corte Inglés también impulsaron su estrategia exterior.
Los grandes almacenes El Corte Inglés, embrión del grupo, representaron casi el 60% de la cifra de negocio consolidada, tras crecer un 7%. Alrededor de otro 20% procede de la filial Hipercor, que creció un 5%, mientras que el resto corresponde al resto de negocios. Varias de estas líneas crecieron más del 10%, aunque el caso más representativo fue la cadena Sfera, cuyos ingresos aumentaron más de un 70%.
Todas las sociedades que conforman el grupo consolidado registraron una mejora de resultados sobre 2004, a excepción de dos participadas al 50% de pequeño tamaño. La filial con Repsol que explota tiendas en gasolineras redujo su beneficio, y la firma de alta perfumería Sephora España, donde entró en 2004, cerró en pérdidas.
El presidente apuntó que 2006 será de nuevo un periodo de crecimiento de la economía, pendiente de la evolución del mercado energético y de los tipos de interés, “con su inevitable repercusión en los precios y en la capacidad adquisitiva del consumidor”. A su juicio, el sector de la distribución seguirá marcado por su dinamismo y por la creciente competencia, ya que España resulta “muy atractiva” para los inversores y operadores internacionales.