España busca un compromiso que calme a la industria y a la distribución textil
En medio de un fuego cruzado entre industriales y comerciantes textiles, el Ministerio de Industria intentará negociar en Bruselas una solución que apacigüe a unos y a otros. Las grandes cadenas de hipermercados negaron ayer que tengan problemas de abastecimiento pese al bloqueo de las importaciones chinas.Los seis millones de prendas que se acumulan en puertos españoles tienen un valor aproximado de 18 millones de euros
Mientras crece la presión en toda Europa de los distribuidores textiles, el Ministerio de Industria y Comercio tratará de arrancar la próxima semana en Bruselas un compromiso que asegure el mantenimiento de las cuotas a la importación de textil chino y al mismo tiempo dé una salida para los más de seis millones de prendas que se encuentran bloqueados en puertos españoles por falta de licencias de importación. El ministerio niega que este problema coyuntural vaya a suponer un desabastecimiento en las tiendas.
España se va a mantener firme en el mantenimiento de las cuotas», manifestaron fuentes del ministerio, que sin embargo reconocieron la necesidad de buscar una salida a las mercancías acumuladas en los puertos españoles. «Se trata de unir intereses contrarios», añadieron.
Sobre la mesa hay tres alternativas. La primera, que sería la que mejor vería la patronal textil, sería autorizar la entrada de los productos acumulados a cuenta de las cuotas del 2006 y 2007. La segunda sería darles entrada a cuenta de las cuotas de otros productos que aún no han llegado al límite de importación. Y la tercera – la mejor para los distribuidores- sería dar un periodo de gracia y dejar entrar excepcionalmente la mercancía bloqueada.
En el conjunto de la UE están bloqueadas 66 millones de prendas, que salieron de China pese a no disponer de las correspondientes licencias de importación. «Muchos importadores decidieron acumular mercancía desde el día en que se anunció que se iban a imponer cuotas», dijeron fuentes de Industria. «Hubo un efecto llamada», apuntó Salvador Maluquer, secretario general del Consejo Intertextil. La imposición de cuotas se acordó el 12 de junio, pero hasta el 26 de julio China no repartió las cuotas entre sus empresas. Mientras, hubo una avalancha de pedidos.
Pese a los alarmistas mensajes de Eurocommerce, la patronal europea de distribución, Industria rechaza que haya un riesgo de desabastecimiento en las tiendas. «Tienen material de sobra, han comprado mucho más que el año pasado y las grandes cadenas siempre lo hacen con antelación», aseguraron en el ministerio. «Lo que hay es demagogia y presión psicológica y mediática», opinó Maluquer. «El textil no se acaba en China y hay unos 150 países deseando exportar a Europa, entre ellos Turquía, India o Pakistán», añadió.
Después de la escandalera de los últimos días, las cadenas de hipermercados aseguraron ayer que el bloqueo de productos en las aduanas comunitarias no afecta a su oferta actual ni a la campaña de otoñoinvierno, al tiempo que destacaron su diversidad de abastecimiento. Fuentes de Carrefour indicaron que tienen algunas importaciones paralizadas, pero insistieron en que se mantiene su oferta habitual, porque el porcentaje de compras a China es pequeño, debido a que el 70 por ciento de las mismas se hacen en Europa. Igualmente, Alcampo afirmó que aunque el bloqueo continuara hasta finales de año su oferta de otoño-invierno no se vería afectada.
Inditex, uno de los grupos que podrían verse más perjudicados por la alta rotación del producto, ha minimizado el impacto. Y Cortefiel explicó que ha recurrido a proveedores de Europa del Este y de otros países asiáticos, pero «sin cambios operativos importantes».
La Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged) confió en que la UEy China alcancen una solución razonable y subrayó la «buena fe» de las grandes superficies. «Estas empresas han importado de buena fe productos textiles procedentes de China, conforme a una normativa que, posteriormente, se ha cambiado, sin haber existido ni siquiera un periodo transitorio, lo que ha dado lugar a la situación actual», argumentó. Según Anged, los hipermercados «no son ni los únicos ni los principales importadores de las mercancías procedentes de China», sino que como ya ha señalado la patronal Eurocommerce, es un problema que afecta a cientos de miles de pequeños, medianos y grandes comercintes.
Están bloqueadas millones de prendas, pero en valor las cifras de las que se está hablando no son muy altas, teniendo en cuenta a los bajos precios a los que están entrando los pantalones (2 euros) y muchas otras prendas. «La mercancía bloqueada en España estaría valorada en unos 18 millones de euros», opinó Salvador Maluquer.
Las cuotas en sí han saltado por los aires: ayer se llegó al límite en la importación de vestidos, con lo que en teoría ya no pueden entrar más productos de vestuario. «