La confección cae casi un 10% desde la invasión de prendas chinas
La liberalización del mercado internacional de la ropa ha sentado muy mal al sector textil español. Mes a mes, los datos oficiales confirman el tremendo impacto que para la industria de la moda, sobre todo en comunidades como Galicia, Cataluña o Valencia, ha tenido la invasión de las prendas elaboradas en China tras el fin de las cuotas arancelarias el pasado 1 de enero. En los cinco primeros meses del año, la producción de la confección -la actividad predominante en el sector de la comunidad gallega- y la peletería ha caído un 9,9%. El descenso en el textil fue de un 11,7%, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), hechos públicos ayer.
Estas cifras -que radiografían el sector antes de que la Comisión Europea (CE) llegara a un acuerdo con el Gobierno de Pekín para limitar sus exportaciones de prendas- confirman que la invasión del gigante asiático no ha sido cosa de un mes, ni siquiera de un trimestre. Lo cierto es que la liberalización del mercado sí se notó con más fuerza entre enero y marzo, cuando la producción industrial del textil registró una bajada del 14,7%, y la confección, un 9,8%. Fue también el periodo en el que se iniciaron los cierres masivos de talleres y pequeñas firmas, incapaces de hacer frente a los costes que se barajaban en las grandes fábricas de China, Bangladesh o India.
El calzado es otro de los sectores que más han notado la llegada de los productos asiáticos. La industria de los zapatos pierde fuelle en España. El Índice de Producción Industrial (IPI) relativo a esta actividad recoge una caída en mayo del 13,6%, en comparación con el mismo mes de 2004. En lo que va transcurrido de 2005, el calzado acumula un descenso del 15,1%.
En el caso de los zapatos, Bruselas y Pekín no han abierto ninguna negociación, aunque la CE sí ha iniciado una investigación para saber si China vende por debajo de los costes.