La informática se vuelve indispensable en el sector de la franquicia

Y es que las nuevas tecnologías son básicas para la buena marcha de un negocio basado en la relación entre franquiciador y franquiciado. Ya sea para que el primero pueda controlar a los segundos, para que estos estén debidamente informados, reciban datos e información indispensable para la andadura del negocio como el control de las ventas, stocks, demandas determinadas, etc., sobre todo, si hablamos de franquicias de distribución en las que el franquiciador suministra algo al franquiciado.

Actualmente, a la hora de solicitar servicios informáticos, las franquicias tienen dos prioridades claras. Una de ellas es el desarrollo de una página web. Aunque Internet hoy en día no tenga por qué ser una fuente de negocio rentable en sí misma, hace ya tiempo que no estar en Internet, no ser encontrado fácilmente en Internet por un potencial cliente, o no disponer de una web de calidad apropiada en función de lo ofrecido por cada empresa, perjudica muy seriamente la imagen corporativa.

La otra prioridad es dotarse del sistema informático apropiado para poder realizar el seguimiento adecuado de cada uno de sus establecimientos, de manera centralizada e independientemente de que el establecimiento sea franquiciado, propio o asociado. Disponer de un correcto sistema de información de gestión de los establecimientos permite una gestión optimizada de la red de establecimientos, garantiza una mayor competitividad y dota de mayor capacidad de negociación para la central de franquicias.

Asimismo, estamos en un sector en el que salvo excepciones importantes, las empresas franquiciadoras nacen con poco capital, con lo que el negocio crece a la par que el número de tiendas. En este marco, la inversión necesaria en nuevas tecnologías (PCs, software y redes de servicio), es probable que absorba un elevado porcentaje del capital inicial, aunque las empresas son conscientes de que se trata de un elemento primordial para el funcionamiento de la enseña, sobre todo si pensamos que se está utilizando continuamente el comercio electrónico entre empresas para comprar, distribuir y vender productos y servicios.

David Alonso, director de Proyectos del Servicio Informático de la consultora de franquicias Tormo & Asociados, sabe que en los comienzos de una franquicia, aunque sea importante el campo informático, no puede realizar un enorme despliegue de medios. “En el mayor número de ocasiones los establecimientos inician su andadura con un único ordenador o dos, mientras que en central se suele disponer de una red de ordenadores y algún servidor que otro. Hay que tener en cuenta que cada vez los servicios informáticos de almacenamiento y gestión de sistemas son mejores y más económicos, pudiendo de esta manera disponer de soluciones modernas sin necesidad de realizar grandes inversiones iniciales en máquinas”, indica.

Aún así, como la informática se actualiza diariamente a velocidades de vértigo, lo que hoy es tecnología punta puede que en poco tiempo esté desfasada, aunque no obsoleta. Esto se traduce en nuevas necesidades económico-financieras para una gran parte de las franquicias. En definitiva, el empleo de las nuevas herramientas de hardware, software o servicios, son cada vez más necesarias en el mercado de gestión. Jesús María Pegalajar, director de Marketing y Franquicias de Tiendas UPI, coincide con la idea de la acentuada celeridad de este desfase tecnológico. “Una de las principales características de este sector es la obsolescencia de los productos informáticos, es decir, la rapidez con la que un producto deja de ser una novedad tecnológica como consecuencia de la salida al mercado de otro que le sustituye y mejora. Esta situación es la que provoca el exhaustivo análisis del mercado que las principales empresas tecnológicas llevamos a cabo para ofrecer lo último al mejor precio”, manifiesta.

Por otro lado, al trazar este panorama de sistemas informáticos en franquicias hay que incidir también sobre su condición, es decir, si es franquiciadora o franquiciada. El primer caso se refiere a la que tiene varios centros funcionando desde hace años y que, independientemente de unas oficinas centrales, cuenta con su almacén. Puede tener una estructura de informática y de comunicaciones razonablemente estructurada que, dependiendo de la infraestructura y su despliegue del sistema informático necesario, tendrá mayor o menor necesidad de renovación constante de dicho sistema.

Sectores y evolución de las comunicaciones

En cuanto a los sectores donde existe mayor demanda de sistemas de punto de venta y al mismo tiempo disfrutan de mayores ofertas de aplicaciones estándar, son el Horeca (Hostelería, Restaurantes y cafeterías) y el Retail (Venta al detalle). El sector servicios, por lo general necesita sistemas algo más potentes que un Terminal Punto de Venta, por lo que las soluciones estándar, siendo numerosas, suelen tener un coste algo más elevado, y no suelen cumplir todas sus necesidades.

Aún hay numerosos sectores que debido a la poca demanda de los mismos por soluciones tecnológicas hasta la fecha, apenas disponen de soluciones estándar totalmente adecuadas a un modelo de franquicias suficientemente económicas y, en muchos casos, los clientes se ven obligados a realizar proyectos casi a medida, por ejemplo en el sector inmobiliario, veterinario o clínico.

“Asimismo”, apostilla David Alonso, “uno de los cambios en la demanda por parte de nuestros clientes a nivel tecnológico se ha debido fundamentalmente a la mejora y abaratamiento de las comunicaciones desde la aparición de los distintos operadores de ADSL del mercado, a pesar de que sus servicios no son competitivos si se comparan con los ofrecidos en el resto de países de la Unión Europea”, sostiene.

Esta mejora en las comunicaciones ha permitido el desarrollo de soluciones on-line como, por ejemplo, el uso de Terminales Punto de Venta con conexiones on-line para consulta de stock en almacenes centrales en tiempo real, pagos con tarjeta de crédito por pasarelas de pago en Internet o el desarrollo de intranets que ofrezcan todo tipo de soluciones a clientes finales, franquicias, proveedores y personal interno de la franquicia.

Por todo ello, se puede concluir diciendo que de nuevo se observa que el sector de la franquicia va accediendo cada vez más a las nuevas tecnologías, pero aún es poca la inversión realizada, sobretodo si atendemos a los estudios comparativos que constantemente salen en prensa respecto al resto de países europeos.