La Mallorquina anuncia un plan de expansión por Madrid, coincidiendo con su 125 aniversario
La emblemática pastelería del centro de Madrid, La Mallorquina, acaba de cumplir 125 años de actividad y lo celebrar anunciando un nuevo plan de expansión por la capital. De este modo, la cadena apuesta por la zona de El Rastro para inaugurar un nuevo establecimiento el próximo 14 de julio, exactamente en la calle Mira el Río Baja, 21. Ya en septiembre, tiene previsto otra inauguración, esta vez en el barrio de Salamanca, en la calle Hermosilla, 30 esquina con Velázquez,
El primero de ellos, solo abrirá los domingos, mientras que el segundo, contará con obrador propio que se convertirá en el ‘taller’ de su nueva línea de productos. Entre los nuevos productos, destaca el lanzamiento de una nueva edición de napolitanas, uno de sus dulces más famosos, que estarán a la venta en el segundo trimestre del año.
En la actualidad, La Mallorquina afronta el siglo XXI de la mano de la tercera generación de las familias Quiroga y Gallo, conservando la esencia de los inicios, sin renunciar a los nuevos tiempos para mejorar día a día. Los productos y servicios son conocidos y recomendados en cientos de guías internacionales. Su labor al frente de esta casa centenaria ha sido reconocida en varias ocasiones por la Cámara de Comercio, por el Ayuntamiento de Madrid con una placa agradeciendo los más de cien años que lleva esta casa endulzando a quien visita la capital, o con la Medalla del 2 de mayo de la Comunidad de Madrid, entre otros reconocimientos.
Sostenible y responsable
Más de 25 expertos reposteros forman este equipo de maestros pasteleros, algunos desde hace 40 años, que se pone manos a la masa cada día a las 6 de la mañana y continúa horneando ininterrumpidamente hasta las 8 de la tarde. No importa a qué hora visites La Mallorquina, siempre saldrás con producto recién hecho en tus manos.
Asimismo, en el obrador reciben a diario las mejores materias primas de España, todo productos 100% frescos. No trabajan con precocinados, ni congelados, su entrada está prohibida en La Mallorquina. De hecho, ni siquiera tienen congelador, pues es contrario a su filosofía repostera.
Y por si fuera poco, es una empresa tan responsable que el producto que sobra, y no sobra todos los día, lo donamos a una institución de caridad.