La OCDE cree que España no crecerá más del 2,75% en el 2005
Considera bien encaminada la estrategia del Gobierno, pero reclama medidas de mayor calado, como eliminar incentivos fiscales a la compra de vivienda.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) cree que el alza del petróleo volverá a pasar factura este año a la economía española, que según sus cálculos no podrá crecer más del 2,75%, frente al 2,9% que el Gobierno ha fijado como objetivo en el Plan de Estabilidad enviado a la Comisión Europea. En su informe periódico sobre la economía española, la OCDE considera que la estrategia del nuevo Gobierno socialista va en la dirección correcta», pero que las medidas que ha puesto en marcha deben ser complementadas con reformas adicionales que aceleren la convergencia con la UE, entre ellas una eliminación de los incentivos fiscales a la compra de vivienda para enfriar el mercado y desarrollar los alquileres.
«El nuevo Gobierno se ha embarcado en una estrategia cuyo objetivo es aumentar la productividad», elevando el gasto en educación y en actividades de investigación y desarrollo, mediante una política fiscal «prudente» y con un marco «más transparente», destaca la OCDE.
No obstante, la organización que agrupa a las economías más potentes del mundo, advirtió de que el mantenimiento del alza en los precios inmobiliarios, una inflación relativamente alta que está minando la competitividad, las escasas mejoras en productividad y los altos niveles de desempleo son tensiones capaces de «socavar el fuerte crecimiento» español.Así, para la OCDE, estrechar el diferencial de inflación con la eurozona, que desde 1997 ha acumulado ocho puntos porcentuales, es fundamental para evitar una erosión de la competitividad, y atribuyó los altos precios a las rigideces en el mercado laboral y en los de bienes y servicios.
Agua fría al ladrillo
En este sentido, pide estimular la competencia en varios sectores y un «enfriamiento en el mercado de la vivienda», que entiende como «esencial para el mantenimiento de la estabilidad macroeconómica». Para la OCDE, las reformas en esta materia deben «ir más allá de las ya aprobadas y eliminar los obstáculos que limitan el suministro de terrenos para viviendas».La OCDE aboga por eliminar los incentivos fiscales a la compra de vivienda para «reducir la presiones de la demanda», y desarrollar el mercado de los alquileres. En este sentido, considera que el rápido incremento del endeudamiento de las familias, asociado al elevado precio de la vivienda, podría acentuar la vulnerabilidad de la demanda interna frente a unos tipos de interés más altos, una advertencia que vienen planteando también el Banco Central Europeo y el Banco de España.
Menor protección al empleo fijo
En materia laboral, y mientras el Gobierno socialista plantea a los agentes sociales una generalización de los contratos indefinidos con despidos de 33 días, frente a los 45 habituales, la OCDE precisamente propone reducir la protección para el empleo fijo. Además, pide aplicar los límites legales vigentes para la renovación de contratos temporales, así como reducir las rigideces de los salarios nominales mediante una reforma de la negociación colectiva, que incluiría una eliminación de las cláusulas de revisión salarial o, en caso de no poder eliminarlas, asociarlas a la inflación subyacente.
Asimismo, señala que las negociaciones salariales deberían tener en cuenta la evolución salarial de la zona euro. «Una reforma activa de las políticas laborales y de los subsidios de desempleo ayudará a reducir el desempleo», precisa el informe. Recomienda, además, reducir la segmentación en el mercado laboral, así como aumentar la participación femenina con la adecuación de los horarios laborales.La OCDE considera que España va a la zaga en cuanto a la inversión en capital humano y desarrollo tecnológico, y recomienda que se evite el mantenimiento de la especialización en sectores de tecnología relativamente baja, en los que se enfrentará a una competencia creciente de países con menores costes laborales.
Más competencia
También pide la OCDE incrementar la competencia en varios sectores, y sugirió desmantelar las barreras al establecimiento de nuevos hipermercados y centros comerciales erigidas por los gobiernos autonómicos. Además critica el cambio en la ley marco que regula los horarios comerciales, aunque reconoce que ha permitido zanjar una prolongada disputa legal.En las industrias de red, como el sector energético y la telefonía móvil, considera necesarias nuevas reformas encaminadas a reducir el poder en el mercado que ejercen un número reducido de empresas, y explica que la política de competencia se vería reforzada con la fusión del Tribunal de Defensa de la Competencia y el Servicio de Defensa de la Competencia para crear sinergias en las investigaciones.
El organismo destaca la importancia de perfeccionar la administración presupuestaria y mejorar las relaciones entre las Administraciones Públicas para mantener las ventajas de la consolidación presupuestaria, y que uno de los principales retos a largo plazo será garantizar la sostenibilidad presupuestaria de los sistemas de pensiones. En materia educativa, la OCDE pide incentivar como una mayor autonomía para las escuelas, ligar la financiación de las universidades a su s resultados, elevar las tasas y estimular el gasto privado en I+D.