Los trabajadores españoles son más emprendedores que el resto de los europeos
Los trabajadores españoles prefieren ser autónomos antes que asalariados. Esta es la conclusión que presenta un informe de las Cámaras de Comercio del que se desprende que el 56% de los españoles prefieren ser autónomos antes que trabajar para otra persona, frente al 45% de los trabajadores europeos.
Estas son las principales conclusiones de una encuesta elaborada en mayo de 2004 a 21.051 personas en los veinticinco países de la Unión Europea, junto a Islandia, Noruega, Liechtenstein y Estados Unidos.
De este informe también se desprende que, a pesar de la preferencia española por el régimen autónomo, la situación estadounidense supera incluso a la española, pues en Estados Unidos son aún más emprendedores, y el 61% de los encuestados muestra predilección por el trabajo por cuenta propia, frente al 34% que opta por trabajar para otra persona.
Más obstáculos para los españoles
Sin embargo, en España parece existir» un mayor número de obstáculos para los emprendedores que en el resto de Europa y de Estados Unidos, por lo que el 72% de los encuestados no cree que pueda tener su propia empresa en los próximos cinco años.
Así, según la misma, la causa principal que empuja a los españoles y al resto de europeos a trabajar por cuenta propia es la independencia que conlleva este tipo de formación empresarial.
Los estadounidenses, sin embargo, prefieren ser autónomos porque «no hace falta adaptarse» al entorno y por la posibilidad de crear el suyo propio.
Por otra parte, el 42% de los europeos encuestados prefiere estar asalariado debido a la estabilidad económica y en el empleo que esto supone, mientras que los estadounidenses eligen el trabajo como asalariados para evitar las decisiones difíciles que se deben tomar cuando se crea o se tiene un negocio propio.
Falta de seguridad y de formación
Sin embargo, hay opiniones comunes entre estadounidenses y europeos que motivan esta elección, como la falta de seguridad y de formación o las barreras administrativas, aunque todas ellas tienen menor repercusión en el caso de Europa que en el de España o EEUU.
Pero los ciudadanos de ambos continentes vuelven a diverger si se les pregunta por los riesgos que consideran más importantes a la hora de crear una empresa.
Así, el 45% de los europeos autónomos cree que la quiebra es el mayor riesgo que se debe afrontar, mientras que los estadounidenses temen más a la incertidumbre que se plantea sobre los ingresos que puedan generar.
Además, el 22% de los estadounidenses cree que el mayor inconveniente al que hay que hacer frente al trabajar por cuenta propia es el gasto de tiempo y energía necesarios para que la empresa salga adelante.