Para las empresas, las franquicias pueden representar dos cosas: crecimiento o fracaso
Qué es una franquicia
La franquicia es un contrato mediante el cual el dueño de una marca concede los derechos de comercialización a un tercero que desarrolla su propio negocio basado en esa marca pero bajo unas condiciones explícitas. El dueño de la marca recibe unas regalías por cada franquicia que concede y el inversionista obtiene la rentabilidad que le garantiza un negocio con trayectoria y posicionamiento en el mercado.Pero para recibir esos beneficios es necesario conocer cómo funciona el negocio y aprender de las experiencias positivas y negativas para evitar inconvenientes. En concepto de María Victoria Ayala, decana de Administración de la Escuela Colombiana de Ingeniería, en el país hay gran desconocimiento de lo que significa una franquicia. «Hay quienes piensan que el cumplimiento de normas es excesivo para el funcionamiento de los negocios y prefieren no acceder a este mecanismo», dice.Jorge Andrés Orozco, gerente de Tormo & Asociados, añade que falta preparación para estructurar los modelos de franquicia. «Los contratos de palabra no sirven y los proyectos hechos a medias tampoco».
Proyecciones de crecimiento
Tormo & Asociados proyecta que para el 2008 habrá en Colombia 550 franquicias, lo que supone más oportunidades tanto para los comerciantes como para los inversionistas. Las estrategias de divulgación para desarrollar este esquema suponen que cada vez habrá menos marcas entregadas en concesión.
Timoteo y Mondongo’s son dos ejemplos claros de ello. El personaje de tira cómica que se publicó en EL TIEMPO hacia 1985, llegó a tener 20 tiendas propias en Colombia y hoy es reconocida en varios países por sus mensajes de expresión social. Se dispone a abrir operaciones en República Dominicana a través de un primer contrato de franquicia.
«Nuestra decisión de desarrollar una franquicia luego de 21 años de existencia obedece al deseo de divulgar la fortaleza de Timoteo, dar a conocer los 20 personajes de autoría propia que se han creado a su alrededor y proteger nuestra marca, que desde un comienzo ha sido vulnerable a las imitaciones y falsificaciones», dice Clara Inés Amaya, representante de Timoteo.
Mondongo’s, de Medellín, también se dispone a crecer por franquicia. Esta firma que ya tiene un negocio en Miami estudia la apertura de nuevos puntos de venta en el exterior y tiene dentro de sus planes abrir mercado en las principales ciudades de Colombia.
Qué deben tener en cuenta quienes compran y quienes venden
«Montar una franquicia requiere tiempo y dedicación para evitar posteriores dolores de cabeza. Comprarla también exige cuidado, pues en los dos casos está en juego la imagen y credibilidad de las marcas y el dinero que se invierte», dice el consultor Julio Senior.
Los consultados llaman la atención sobre casos como la franquicia extranjera de pizza J. Mark Food que llegó al país con muchas expectativas, hizo un gran lanzamiento, contactó a las personas y luego poco se volvió a oir. En este caso el comprador de la franquicia debe investigar muy bien la marca y asegurarse de que lo que ofrecen es real. «Todo debe quedar por escrito», dice Senior.
Otro caso de franquicia que se fue del país por falta de adaptación al mercado fue el de Hamburguesas Wendy’s. «De esta experiencia hay mucho que aprender. La lección es que hay que estudiar a los consumidores y diseñar la franquicia a la medida de estos en cada país donde se quiera ofrecer el negocio», explica Victoria Ayala.
Otra franquicia para la que no todo fue color de rosa es KFC que puso en aprietos económicos a sus representantes y tuvo que cerrar algunos puntos.
En los casos de las firmas internacionales, además de la adaptación a los mercados, el riesgo cambiario puede ser otra ‘piedra en el zapato’.»