Shopopop, el BlaBlaCar de las entregas a domicilio llega a España
Shopopop, líder europeo de entrega colaborativa a domicilio, aterriza en España. La enseña llega al territorio nacional tras conseguir una ronda de financiación de 20 millones de euros de la mano del fondo GO Capital y Meridiam. Con el auge del e-commerce producto de la pandemia, Shopopop ha conseguido extender sus entregas a cinco países: Bélgica, Luxemburgo, Italia, Portugal y Países Bajos. Ahora llega a España para reforzar una red única en Europa, cuyo objetivo es hacer que las entregas a domicilio sean más flexibles, asequibles y sostenibles.
Fundada en 2016 en Nantes, Shopopop ha desarrollado la red logística más extensa de Francia en menos de cinco años, estando disponible en 15.000 ciudades francesas. Su servicio de entrega se apoya en una comunidad de repartidores privados, los Shoppers, ciudadanos que aprovechan sus viajes diarios para repartir productos a domicilio desde los puntos de venta asociados con la plataforma y reciben una compensación económica a cambio. La primera parada del plan de expansión de la compañía es Madrid. La marca ya ha comenzado a tejer una red de tiendas asociadas en la capital, entre las que se encuentan floristerías y tiendas de vinos.
Una solución social y sostenible
La situación actual del sector logístico está marcada por la llegada masiva de ofertas vinculadas al ‘Quick Commerce’. Shopopop ofrece un modelo de crowdshipping, una rama de la economía colaborativa aplicada a la mensajería. Consiste en aprovechar el viaje de una persona para que lleve un paquete a otra que se encuentra en su camino. Como BlaBlaCar, pero con entregas a domicilio.
Su objetivo es fomentar la ayuda mutua y el intercambio de servicios entre particulares. Además, al permitir a los consumidores compartir sus viajes, también contribuye a reducir la congestión en las ciudades y nuestras emisiones de CO2. Así, el servicio se basa en los desplazamientos habituales de los ciudadanos que, para ganar un dinero extra y ayudar a su comunidad, recogen las compras de sus vecinos en los puntos de venta y se las entregan. A cambio de este servicio, reciben una contribución a los gastos de entre 5 y 8 euros.
«Gracias a nuestro modelo de negocio se consigue un óptimo rendimiento logístico con mayor flexibilidad. Por un lado, queremos ayudar al comercio local a competir frente a grandes como Amazon y otros gigantes del e-commerce. Por otro lado, fomentamos la economía colaborativa para que cualquier persona pueda ganar un dinero extra potenciando acciones más sostenibles «, explica Clara Lloveres, General Manager para España de Shopopop.
«Hemos visto un aumento del 300% en el número de entregas entre 2019 y 2020. Y con más de 1M de entregas entre enero y noviembre de 2021, hemos conseguido retener a nuestros usuarios habituales y atraer a nuevos clientes. Nuestro negocio sigue creciendo y Shopopop ha pasado de ser una solución de emergencia a un reflejo cotidiano. En términos de eficacia y rapidez, nuestra organización es la única alternativa creíble a los gigantes de la subcontratación. Pero defendiendo un modelo social y medioambiental sostenible», subrayan Antoine Cheul y Johan Ricaut, fundadores de Shopopop.